MGP | Noticias

El Presidente de la República Luis Guillermo Solís y el Canciller Manuel A. González firmaron el Reglamento para la declaratoria de la Condición de Persona Apátrida, durante una actividad, celebrada este jueves 7 de abril, en el Salón Dorado, en la Cancillería.

Una persona apátrida es la que no es reconocida como nacional por ningún Estado, y se considera que hay más de 10 millones en todo el planeta.  Suelen ser personas a las que un Estado les niega la nacionalidad por ser hijo de padres extranjeros, o que pertenecen a algún país que desaparece por cambios geopolíticos.

Luis Guillermo Solís, Presidente de la República, aseguró que la patria alude a la identidad, a la pertenencia, a las raíces profundamente colocadas en principios y valores, en presencia, en lenguas y religiones.

“Esa patria que convoca a la hermandad, a la fraternidad, al encuentro, al establecimiento de la justicia, al entendimiento profundo de la solidaridad es la patria que queremos devolverle a quienes no la tienen”, expresó.

El mandatario reconoció la labor de la Viceministra de Gobernación, Carmen Muñoz, al afirmar que fue ella quien estimuló su interés en el tema, y la razón por la cual firmó el reglamento, pues su perspectiva es especialmente relevante, ya que alude a la fibra humanitaria de la comunidad internacional.

Al respecto, Muñoz coincidió con Solís en que este es un tema profundamente humano, que toca nuestras fibras más sensibles.

“Cuando uno se entera de que hay hombres, mujeres y niños, en algún lugar de nuestro país, sin ningún tipo de posibilidad de ser reconocidos en virtud de sus derechos y necesidades, y cuando a nosotros se nos da la oportunidad de cambiar esa situación, debemos atenderla. Ejercer el poder no tiene sentido si perdemos de vista que en el centro de toda esta actividad está la persona humana, y que es nuestra obligación transformar la vida de estas personas”, manifestó Muñoz.

Por su parte, el Canciller de la República, Manuel E. González, apuntó que la firma de este reglamento es una forma de garantizar los derechos humanos de las personas que no tienen patria.

“El Estado costarricense se ha comprometido con la erradicación de esta forma indigna de sobrevivencia. El procedimiento al que nos estamos sumando, garantiza que estas personas puedan disfrutar de sus derechos humanos, empezando por los elementales como es el derecho a un documento de identidad que lo haga destinatario de deberes y derechos de un Estado”, aseguró González.

Costa Rica se convierte en uno de los pocos países que son parte de la Convención sobre el Estatuto de los Apátridas de 1954, y de la Convención para reducir los casos de Apátrida de 1961.

En la imagen el Presidente Luis Guillermo Solís y el Canciller Manuel E. González firmaron el reglamento que permitirá la puesta en marcha de la declaratoria.